VENDIERON CUATRO PROPIEDADES PERO EL DINERO… AL DIA DE LA FECHA SE HA AGOTADO
Como es de conocimiento público, hace apenas cuatro meses falleció repentinamente CARLOS DOMINGO PAVAN, tal suceso repentino fue aprovechado por su hermana Carmen Zulema Pavan quien, en ausencia de la legítima esposa del difunto, no solo arrasó con todas las pertenencias, documentos, escrituras y dinero, sino que, mientras su señora tramitaba en Cuba (lugar del casamiento) la respectiva partida con todos los trámites consulares (ya que la original obraba en poder del difunto y obviamente fue destruida) dio apertura al juicio sucesorio y solapadamente preparó la realización de enajenaciones a amigos, allegados y socios suyos y de su hijo.
Es así como, el día 9 de marzo de 2009, ocultando la estafa preparada bajo inocente ¨cotejo de documentación¨ fue extraído el expediente del Juzgado de Paz Letrado de General Paz y entregado a la escribana Silvia Beatriz Salem, quien con una celeridad y esmero dignos de mejor causa, CELEBRO TRES ESCRITURAS EN EL MISMO DIA, enajenándose así la vivienda designada como Circ. I, Secc C, Qta. 65, Mza. 65-b, a Juan Pablo Uribarri, la vivienda designada como Circ. I, Secc C, Qta 65, Mza. 65 b, Parcela 7-a, a mariano Santalucía y dos cocheras ubicadas sobre la calle Rivadavia de la ciudad de Ranchos a Rafael Marcelino González.
Anoticiado el Juez interviniente de la maniobra ordenó a la señora Carmen Zulema Pavan el depósito judicial del dinero de la venta en 48 horas, a lo que la señora contesto el día 14 de marzo: ¨… al día de la fecha se ha agotado el total de la suma percibida, por lo que no puede procederse al depósito solicitado…¨.
Actualmente la viuda de Pavan se encuentra en los EEUU, desde allí impulsará las acciones legales vía consular contra todos los involucrados, tanto la órbita civil, penal y del Tribunal Notarial, confiando en que la justicia Argentina imparta el castigo correspondiente (prisión de un mes a seis años, art.172 del código penal, articulo 292 del código penal y cte.), ya que seguramente si algún ladronzuelo hubiere roto un vidrio de la casa de Pavan y se hubiere llevado una garrafa para cocinar, iría preso, con más razón quienes robaron las casas enteras.
…Aunque claro, seguramente quien robe la garrafa sería alguien indigente y de piel morena…
N.J. Jardines Sardiñas, apoderada de la viuda de C.D. Pavan conforme poder otorgado ante notaria Bertha A. Palma, Estado de Florida, EEUU.